Tras haber visto ya los dos primeros episodios de la nueva serie de Antena 3, El barco, he de decir que salvando que me recuerda en parte a El internado, sobretodo por la imperiosa manía de hacer a una niña la relatora en voz en off de las desventuras de sus protagonistas, es una serie que promete y que tiene muchas posibilidades, siempre y cuando no se empiecen a liar como ya hicieron al final con el mismo El internado, con el que tiene otras similitudes, aparte de tres actores protagonistas, como pueden ser el misterioso miembro de la tripulación que persigue a uno de los tripulantes y tiene fotos e informes suyos, el que la protagonista haya perdido a su madre recientemente... Cosas, todas ellas, que son fáciles de obviar teniendo en cuenta la idea argumental.
Le auguro mucha vida a esta serie, y varias sorpresas nos depararan los guionistas, pues seguro que tienen la intención de llevarla hasta el extremo. Ahora bien ¿que final esperamos? ¿Que mágicamente reaparezca todo? ¿Que haya quedado un reducto de tierra en la parte que no ha visto el satélite, oportuno momento argumental, donde terminen viviendo o desde donde recuperar el agujero negro y que todo vuelva a su ser? O bien, más disparatado pero, por que no, igualmente creíble, que hayan viajado al pasado o al futuro, igual que hiciera el barco de Kirk Douglas en El final de la cuenta atrás... O, y porque no, que sea un sueño.
Veremos. Como digo, tenemos serie para rato, y me mola.
